Cada año, millones de aves playeras migran desde sus zonas de invernada a lo largo de las costas del Pacífico y el Caribe hasta sus áreas de reproducción en Alaska y norte de Canadá- algunas viajando miles de kilómetros cada año. Los grandes grupos y las largas distancias de viaje hacen que estas aves enfrenten desafíos de conservación únicos. Ellas necesitan hábitats específicos (éstos con frecuencia se extienden a través de límites internacionales) que les garantice a lo largo del año las tres etapas de vida: reproducción, temporada invernal (no-reproductiva) y las escalas temporales. Necesitan también que esos hábitats sean aptos para mantener grandes concentraciones de aves. Si el estado de las zonas de paradas, las áreas de reproducción o de invernada es alterado, las poblaciones de aves playeras reflejarán estos cambios.

Aunque nuestro proyecto monitorea todas las aves playeras encontradas en las áreas de estudio, son el playero occidental (Calidris mauri) y el playero dorsi rojo (Calidris alpina) las especies focales para este estudio. Nuestros socios, unidos por la conservación de aves playeras a través de límites internacionales, coordinan la recolección de los datos de estas dos especies en todo su rango de distribución para conocer el estado de las poblaciones dentro de los escenarios actuales y concebir estrategias para su conservación y la de sus hábitats en un futuro con cambio climático.

Ambas especies comparten:

• Una amplia distribución
• Poblaciones abundantes, pero se cree que están disminuyendo
• Dependencia a planos mareales y humedales costeros
• Dependencia sustancial al delta del río Copper, un sitio vital a escala temporal para aves playeras migratorias
• Un nicho ecológico similar

Especies de aves playeras focales

Correlimos de Alaska (Calidris mauri)